Hoy es un dГa que jamГЎs podrГ© olvidar,
la gente se arrodilla y mira:
hoy es mi funeral.
Yo no quiero que me traigan ramos
lo que quiero es que no me coman los gusanos.
Un seГ±or con ojos rojos
interpreta muy bien el papel:
«Pobre chico, vaya desgracia,
Dios se apiade de Г©l».
Y en el fondo piensa
«Г©l se lo ha buscado,
era un sinvergГјenza
seguro que estaba drogado»